Una de las ventajas de los monitores ultrapanorámicos son la gran cantidad de espacio que ofrecen al usuario. Son monitores especialmente indicados para entornos profesionales, o también pata gamers que busquen una experiencia muy inmersiva, especialmente en simuladores de coches. Comprar un monitor ultrawide es más caro que adquirir dos pantallas convencionales, pero ofrece varias ventajas importantes con respecto a este setup. La primera es poder prescindir de un corte físico entre dos pantallas, conservando la misma cantidad de espacio de trabajo.
Estos monitores suelen tener paneles curvados, permitiendo un buen ángulo de visión de todas las zonas presentes en la pantalla. Sin ser curvados, las zonas situadas más a los lados nos obligarían a mover mucho la cabeza, y su ángulo de visión no sería óptimo. Las pantallas ultrawide para ordenador son aún caras, y su relación de aspecto es de 21:9, o incluso de 32:9 en el caso de los monitores de mayor tamaño, que en algunos casos llegan a las 49 pulgadas.
Por norma general, es mejor optar por un tamaño de al menos 29 pulgadas en los monitores ultrapanorámicos, para poder aprovechar el espacio extra que nos ofrece su relación de aspecto. Todas las pantallas ultrawide actuales emplean tecnologías LED o IPS, y algunas de ellas cuentan con características especiales para gaming.
Las 8 mejores pantallas ultrapanorámicas
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